Con el buen tiempo, y especialmente durante los calurosos meses de verano, la demanda de bebidas se dispara: es época de festivales de música, de terraceo con amigos o de comidas familiares.
En este contexto, la trazabilidad emerge como un elemento crucial para las empresas que comercializan con este tipo de productos y que tienen que cubrir los picos de demanda cumpliendo en todo momento con los estándares de calidad, además de las exigencias normativas y de los consumidores.
En el siguiente artículo exploraremos la importancia de la identificación en la industria de bebidas, cómo impacta en las preferencias de consumo y cómo se relaciona con la normativa en España.
La identificación de bebidas tiene que adaptarse a una amplia variedad de envases, por lo que las soluciones de marcaje tienen que ser compatibles con materiales como el PET, el vidrio, las latas de aluminio o los tetrabriks, entre otros.
Al mismo tiempo, los sistemas de etiquetado también tienen que ser robustos y rápidos para cumplir con las exigencias de producción, por ejemplo cuando hay que identificar packs. Las velocidades pueden ser de hasta 180 etiquetas por minuto.
Los requerimientos, por otra parte, también son normativos. Por ejemplo, en el caso del sector vinícola, el Reglamento (UE) 2021/2117, que entra en vigor el próximo 8 de diciembre, establecerá la obligatoriedad de detallar en las etiquetas de los vinos los ingredientes empleados en su elaboración, así como la información nutricional, ya sea de forma impresa en la etiqueta o incluyendo en ella un código BIDI o QR.
El etiquetado de productos es el nexo de comunicación principal entre las empresas y los consumidores. El 61,2% de los españoles afirma leer el etiquetado siempre o casi siempre, según un informe de Tendencias de Consumo y Comercialización del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación del Gobierno español.
En este mismo estudio, se reflejan los siguientes aspectos como los más importantes en una etiqueta: fecha de caducidad y de consumo preferente, condiciones de conservación y utilización, y lista de ingredientes.
En el caso concreto de las bebidas, los datos de origen también son relevantes en la compra de productos como los vinos, así como las indicaciones de denominación de origen protegida (DOP) en aquellos casos en que existan.
La identificación es pues un pilar fundamental en la industria de bebidas, especialmente en épocas de alta demanda como el verano, ya que permite rastrear cada paso del proceso de producción, proporciona información precisa y transparente a los consumidores y permite el cumplimiento regulatorio.
En un mundo en el que los consumidores valoran cada vez más la trazabilidad y la información en las etiquetas, las empresas de bebidas deben reconocer su importancia y trabajar para implementar sistemas sólidos de seguimiento y control en toda la cadena de suministro.
En Soleti disponemos de una amplia gama de soluciones y productos que permiten a los fabricantes la identificación de bebidas en cumplimiento con las legislaciones vigentes y con los requerimientos de sus clientes.